El IRTA de Cataluña coordina el proyecto europeo ProFuture, que pretende explorar el cultivo de varias microalgas y lanzar al mercado alimentos enriquecidos con ese fitoplancton. Desde la citada entidad se indica que, por ejemplo, la espirulina necesita muy poco para generar proteína: agua salada, bicarbonato, un puñado de minerales, y luz y calor. Continúa diciendo que “siguiendo una receta tan sencilla como la fotosíntesis, en los tanques de la empresa Organa, en Almenar (Lérida), crece un microorganismo que contiene niveles insospechados de nutrientes; con hasta un sesenta por ciento de proteína, además de ácidos grasos saludables, fibras, vitaminas y antioxidantes, las microalgas como la espirulina se perfilan como una oportunidad estratégica para blindar la sostenibilidad y la seguridad alimentaria mundial”. El IRTA de Cataluña señala que “la riqueza nutritiva del fitoplancton sale muy poco cara en términos de recursos y huella ecológica; las microalgas crecen de cuatro a quince veces más rápido que proteínas como el trigo, las legumbres y la soja, y sus cultivos no compiten por el suelo agrario y no piden grandes cantidades de agua dulce”. En cuanto al abanico de aplicaciones del fitoplancton, de los hornos del IRTA de Cataluña ya han salido panes enriquecidos con espirulina, de tonalidad verdosa. También se quiere testar productos como pasta, cremas de verdura, barritas, salchichas y bebidas deportivas, además de cuatro tipos de pienso para ganadería y acuicultura.
Otras noticias
Finaliza la vendimia en la Denominación Campo de Borja, con una producción algo superior a la del año pasado e inferior a la media de la última década
La Denominación de Origen Protegida Campo de Borja da por finalizada la vendimia, una campaña que ha durado ochenta y dos días, marcados “por las lluvias intermitentes y por unas condiciones climáticas adversas”. El volumen de producción de la campaña ha sido finalmente de veintitrés millones y medio de kilos de uva, lo que representa un incremento del once por ciento respecto al año pasado y un descenso del veintinueve por ciento respecto a la media de la última década, fijada en treinta millones y medio de kilos de uva. La Denominación de Origen Campo de Borja señala que “los primeros vinos de garnacha, variedad emblemática, saldrán al mercado en los próximos meses”.