Se ha constituido la federación de asociaciones vinculadas con la trufa negra (Tuber melanosporum) de Aragón y ha presentado la marca conjunta Trufa Negra d’Aragón. Es el resultado de la unión de la Asociación de Recolectores y Cultivadores de Trufa de Aragón (Huesca), Asociación de Jóvenes Truficultores de Teruel y Asociación de Truficultores y Recolectores de Trufa Negra de las comarcas de Zaragoza. El objetivo que persiguen la nueva federación y la nueva marca conjunta es “potenciar la imagen, de tal manera que quien adquiera Trufa Negra d’Aragón lo haga sabiendo que está comprando un producto de calidad contrastada”.
Se cuenta con el respaldo de entidades como el Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria (CITA) de Aragón y como el Centro de Investigación y Experimentación en Truficultura (CIET), ubicado en Graus (Huesca).
Se ha presentado un informe sobre el sector de la trufa en Aragón:
“Aragón se consolida como una de las mayores zonas productoras de trufa del mundo. La truficultura es una actividad que se encuentra en pleno proceso de desarrollo en este territorio, con un crecimiento aproximado de quinientas hectáreas anuales y con una superficie de diez mil kilómetros cuadrados aptos para el desarrollo de la trufa negra. El cuarenta y cuatro por ciento de los viveros de planta micorrizada de España se encuentra en Aragón, y suponen cerca del setenta y cinco por ciento del total de la producción anual del país, con alrededor de trescientos cincuenta mil plantones. El once por ciento del total mundial de las plantaciones productoras de trufa negra se encuentran en Aragón y se estima que el cincuenta por ciento de la producción global de estos hongos es aragonés”.
Otras noticias
Centros tecnológicos, cooperativas y empresas de Aragón van a estudiar cómo combatir las aflatoxinas en el maíz
Se pone en marcha en Aragón un proyecto de cooperación que lleva por nombre “Cambio climático y aflatoxinas: el desafío en los cultivos de maíz en Aragón”. Centros tecnológicos, cooperativas y empresas van a buscar nuevas herramientas agronómicas para el control de las aflatoxinas.
El estrés hídrico y el aumento de las temperaturas propician su desarrollo. Hasta 2022 sólo se habían detectado en maíz almacenado o producto terminado.
La aparición en campo de aflatoxinas se ha convertido en uno de los principales problemas del sector, ya que su presencia o contaminación puede obligar a la industria a eliminar partidas enteras.
Las aflatoxinas son micotoxinas producidas por hongos, principalmente Aspergillus flavus y Aspergillus parasiticus, que se encuentran en varios cultivos agrícolas, principalmente maíz, cacahuete, pistachos y semillas de algodón.
El maíz es el cultivo de verano más extendido en Aragón. En 2024 abarcó más de ochenta y cuatro mil hectáreas, con un veinte por ciento de la superficie dedicada a consumo humano.
El proyecto está formado por cinco cooperativas (CADEBRO, Servicampo, Nuestra Señora del Rosario, Gallicum y Coopina), dos centros tecnológicos (UNIZAR y FITA) y dos empresas (Tereos &Sweeteners Iberia S.A.U. y Ars Alendi).