Se ha constituido la federación de asociaciones vinculadas con la trufa negra (Tuber melanosporum) de Aragón y ha presentado la marca conjunta Trufa Negra d’Aragón. Es el resultado de la unión de la Asociación de Recolectores y Cultivadores de Trufa de Aragón (Huesca), Asociación de Jóvenes Truficultores de Teruel y Asociación de Truficultores y Recolectores de Trufa Negra de las comarcas de Zaragoza. El objetivo que persiguen la nueva federación y la nueva marca conjunta es “potenciar la imagen, de tal manera que quien adquiera Trufa Negra d’Aragón lo haga sabiendo que está comprando un producto de calidad contrastada”.
Se cuenta con el respaldo de entidades como el Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria (CITA) de Aragón y como el Centro de Investigación y Experimentación en Truficultura (CIET), ubicado en Graus (Huesca).
Se ha presentado un informe sobre el sector de la trufa en Aragón:
“Aragón se consolida como una de las mayores zonas productoras de trufa del mundo. La truficultura es una actividad que se encuentra en pleno proceso de desarrollo en este territorio, con un crecimiento aproximado de quinientas hectáreas anuales y con una superficie de diez mil kilómetros cuadrados aptos para el desarrollo de la trufa negra. El cuarenta y cuatro por ciento de los viveros de planta micorrizada de España se encuentra en Aragón, y suponen cerca del setenta y cinco por ciento del total de la producción anual del país, con alrededor de trescientos cincuenta mil plantones. El once por ciento del total mundial de las plantaciones productoras de trufa negra se encuentran en Aragón y se estima que el cincuenta por ciento de la producción global de estos hongos es aragonés”.
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Los daños por las tormentas de septiembre podrían alcanzar el millón y medio de euros en el municipio turolense de Báguena
Los municipios de las comarcas del Jiloca, Campo de Daroca y Calatayud sufrieron en septiembre lluvias torrenciales, que causaron cuantiosos daños. Se pone el ejemplo del municipio turolense de Báguena, con precipitaciones que superaron los cuatrocientos litros por metro cuadrado. Los daños estimados se cifran en “seiscientos mil euros, si bien el montante global podría alcanzar el millón y medio de euros, al considerar pérdidas colaterales”.
Los agricultores y ganaderos de Báguena, en colaboración con las organizaciones agrarias ASAJA, UAGA-COAG y UPA, están evaluando el impacto en sus cultivos y explotaciones.
Realizan el siguiente análisis de la situación:
“Las cosechas de viña y alfalfa han sufrido pérdidas significativas. Además, muchas instalaciones ganaderas han quedado anegadas, obligando a los productores a buscar urgentemente nuevos refugios para sus animales. La incertidumbre sobre la recuperación de los cultivos y la viabilidad de sus explotaciones es palpable. El estado de los caminos de acceso a las fincas es igualmente preocupante, con una acumulación de grava y lodo que dificulta el tránsito. Muchos campos podrían resultar improductivos durante la campaña agrícola de 2025 debido a la imposibilidad de realizar labores agrícolas”.
Y hacen la siguiente solicitud:
“Ante esta grave situación, hemos hecho un llamado urgente a las autoridades, solicitando la intervención del Departamento de Agricultura del Gobierno de Aragón y de la Confederación Hidrográfica del Ebro para llevar a cabo la limpieza de cauces y ramblas, muchas de las cuales están obstruidas por los restos del incendio de 2022 y el material arrastrado por las recientes lluvias; sin una pronta intervención, tememos que futuras tormentas causen daños aún mayores”.