Este proyecto ha sido aplicado durante dos años en La Rioja por un grupo operativo formado por asociaciones representativas del sector, bodegas, investigadores y empresas tecnológicas. Ha desarrollado y puesto en práctica un modelo predictivo adaptado a las condiciones y peculiaridades del viñedo riojano.
El objetivo ha sido doble: “Conseguir una agricultura más sostenible (debido a la reducción en la aplicación de productos fitosanitarios), y hacerla más rentable (al reducir los costes asociados a la producción”.
El Oídio es una enfermedad endémica en La Rioja. En condiciones climáticas que la favorecen puede causar daños considerables en el viñedo. Desde OIDIO Detection se afirma que “los tratamientos son costosos, no necesariamente sostenibles y muchas veces poco efectivos”.
El proyecto se ha puesto en práctica en varias parcelas de viñedo afectadas por Oídio y que son representativas de las diferentes zonas de la región.
Los ensayos se han realizado en 2018 y 2019 con dos criterios (para compararlos entre sí):
– Uno predictivo (basado en las recomendaciones de la herramienta creada para tal fin: Modelo Gubler-Thomas).
– Otro convencional (basado en el criterio del viticultor).
Hay que apuntar que la infección por Oídio se manifestó con mucha severidad en 2018 en la mayor parte de La Rioja, mientras que en 2019 se manifestó con muy poca severidad.
La ayuda del Modelo Gubler-Thomas en la toma de decisiones permitió durante ambas campañas reducir el número de aplicaciones en más de un 20 por ciento en más de la mitad de las parcelas ensayadas.
El grupo operativo del proyecto OIDIO Detection habla de un impacto final cifrado en una reducción del 20 por ciento en las aplicaciones de productos fitosanitarios en la mitad de los viticultores (con un volumen de 16.500 viticultores y más de 500 bodegas).
Por tanto, se habla de un ahorro económico de 1,1 millones de euros aproximadamente, y de un ahorro medioambiental de 9.538 litros de producto fitosanitario al año.
La Federación de Cooperativas Agrarias de La Rioja (FECOAR) valora el resultado de este proyecto.
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España prevé “la mayor producción de almendra de su historia”: más de cuatrocientas sesenta y siete mil toneladas
Se ha reunido esta semana la mesa sectorial de frutos secos. En ella el Ministerio de Agricultura ha presentado sus previsiones de producción relativas a esta campaña, que se inició en septiembre. Estima que va a ser “la mayor producción de almendra de la serie histórica”: más de cuatrocientas sesenta y siete mil toneladas.
Apunta que “la recolección de frutos secos se va a recuperar en cantidad en esta campaña, tras dos años de mermas por heladas y sequías”.
La previsión indica que “la producción de almendra con cáscara, el cultivo predominante con el ochenta y cuatro por ciento de la superficie total de frutos secos en España, puede alcanzar las cuatrocientas sesenta y siete mil quinientas toneladas, un veinticuatro por ciento más que en la campaña anterior y un ocho por ciento superior a la media de las últimas cinco”.
En cuanto al balance de la campaña pasada, el Ministerio de Agricultura señala que “es destacable el valor alcanzado por las exportaciones de almendra, con un balance positivo superior a los trescientos millones de euros”.
Añade que “la almendra supone el noventa por ciento del valor de las exportaciones de frutos secos españoles; tanto los destinos europeos como extracomunitarios, como Turquía o Egipto, registraron incrementos superiores al veinte por ciento”.
Sigue abierta, además, “la negociación con las autoridades de China para la exportación de pistachos a ese país asiático; es un producto cuya cosecha también va a experimentar en esta campaña un incremento significativo”.












