El Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón (CITA) ha puesto en marcha un ensayo en el Valle del Manubles, en la provincia de Zaragoza, para conocer las condiciones de adaptación de diferentes variedades de plantas aromáticas. El ensayo está dirigido por Juliana Navarro.
Participan nueve agricultores, repartidos entre Ateca, Moros, Villalengua, Torrijo de la Cañada y Berdejo. En sus parcelas se van a plantar 5.000 plantas aromáticas variadas de romero, salvia, tomillo, orégano y ajedrea.
Para comprobar cómo se adaptan a las condiciones de las diferentes localidades, se plantarán en parcelas de regadío y de secano. El cultivo se va a llevar a cabo siguiendo criterios de agricultura ecológica, sin utilizar agrotóxicos.
Juliana Navarro dice que “el cultivo de plantas aromáticas es una alternativa más a los cultivos de la zona que, en general, son frutales, sobre todo para aprovechar tierras que estaban abandonadas o que querían cambiar el cultivo que tenían”.
Es el caso de José María Tabuenca, de Villalengua, quien tiene un terreno en desuso y buscaba un tipo de plantación que fuese lo más ecológica posible y a la que no tuviese que dedicarle el cien por cien de su tiempo.
Juliana Navarro explica que “creemos que las aromáticas son una alternativa para la zona, dada la altitud que tiene y la pluviometría anual, y también considerando la rentabilidad de estos nuevos cultivos, que tienen diversos usos industriales, como producto ecológico para tratamiento de enfermedades o de protección de cultivos”.
Para verificar esta última funcionalidad, una de las parcelas de ensayo se ha destinado al fomento de fauna auxiliar para el control de plagas en una plantación de frutales en ecológico.
El ensayo cuenta con la ayuda de Fernando Escribano, alcalde de Berdejo y uno de los participantes en el ensayo, que será encargado, tal como él indica, de “aprender el manejo y transmitir al resto de los vecinos cómo funcionan y cómo tratarlas, una vez que sepamos cómo se adaptan a nuestro territorio”.
Esmeralda Lázaro Cambronero, de la Casa Rural El Arenal, en Torrijo de la Cañada, se ha animado a participar en este ensayo de cultivo de plantas aromáticas a raíz de haber puesto en marcha, esta primavera, un microhuerto en la casa rural. Ahora, quiere ampliar los cultivos, porque “ha crecido mi interés por las plantas medicinales y sus aceites esenciales”.
Juliana Navarro indica que, desde el CITA, “vamos a evaluar no sólo parámetros agronómicos sino también calidad química y rendimientos en aceites esenciales de estas plantas”.
La segunda parte del ensayo se realizará en el mes de enero, con un cultivo de 2.500 lavandines, que se plantarán en las zonas más altas del Valle del Manubles (Torrijo de la Cañada y Berdejo), ya que se adaptan mejor a zonas de más de 800 metros de altitud.
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El grupo operativo QuesoNat ha dado a conocer las preferencias de los aragoneses a la hora de consumir queso
Zaragoza acogió días atrás una jornada del grupo operativo QuesoNat, integrado por Pastores Grupo Cooperativo, Quesos Sierra de Albarracín, CITA de Aragón y la empresa New Food. Ésta última presentó, ante medio centenar de charcuteros y prescriptores gastronómicos, los resultados del estudio que había realizado sobre hábitos de consumo de queso en Aragón. Son éstos:
– El noventa y cinco por ciento consumen queso de origen animal, siendo el 3,4 por ciento consumidores de queso sin lactosa, y el 1,4 por ciento de queso vegetal.
– El setenta y siete por ciento tiende a comprar marcas de queso aragonesas.
– Las tres marcas de queso aragonesas más conocidas son Queso Sierra de Albarracín, Granja Perales y La Pardina.
– El noventa y tres por ciento expresaron interés por probar quesos con sabores diferentes.
– Los quesos preferidos para consumir son el queso fresco, el queso curado y el queso semicurado.
– Respecto a los momentos de consumo, según el tipo de queso, el sesenta y uno por ciento prefiere el queso fresco en ensaladas; el cincuenta y dos por ciento elige el queso semicurado como aperitivo o para ser parte de una tabla de quesos, y el cuarenta y uno por ciento lo prefiere para sándwiches o bocadillos; y el ochenta por ciento selecciona el queso madurado también como aperitivo o para ser parte de una tabla de quesos.
– En cuanto a los lugares de compra, el setenta y cuatro por ciento dice comprar el queso en supermercados e hipermercados y el veinticinco por ciento en charcuterías y tiendas especializadas.
– El cincuenta y nueve por ciento considera importante el factor precio para la compra del queso. El resto valora más la calidad del mismo.
– Al setenta por ciento de los encuestados les parece relevante que los quesos cuenten con una garantía de origen y autenticidad del producto.
– En cuanto a los envases del queso, el noventa por ciento prefiere que estén hechos de materiales sostenibles y el noventa y siete por ciento que alarguen la vida útil del producto.
– Respecto al tipo de corte, el sesenta y dos por ciento de los encuestados prefieren comprar el queso fresco entero, y ya el treinta y siete por ciento y el cincuenta y cuatro por ciento eligen el formato de cuña precortada para el queso semicurado y para el madurado, respectivamente.
– Para un noventa y uno por ciento de los consumidores de queso residentes en Aragón la corteza del queso es importante en el momento de elegirlo y consumirlo, destacando un cuarenta y cuatro por ciento del total que prefieren quesos con corteza natural comestible.